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miércoles, 20 de junio de 2018

LA GENERACIÓN A LA QUE CLAVARON LOS PIES EN EL SUELO


Yo soy de cuando había trenes enamorados 
que se detenían en todas las estaciones
a requebrar a las muchachas de los bancos.

Yo soy de cuando el mundo era sólido
y había una hora para comer
y otra de noche con ruidos extraños
de somieres y de gatos.

Yo que aprendí anatomía
como el trueque de dos maestros:
tu me enseñas, yo te enseño.
O de dos sicarios:
aquí te pillo, aquí te mato.

Yo soy de los que fueron oyentes de radio
exhibicionista de granos
vidente de lencería voluntario
y llevaba el carné y el peine
cuando iba al cine o al baile
con pantalones campana
y oliendo a perfume de barrio.

Yo soy de aquella generación
a la que diezmó en vena el caballo.
y soñó con que aquella mancha
de Europa, por la humedad del techo,
no era una moneda, sino el cielo
.
Aquella generación que silbaba el futuro
mientras les clavaban los pies al suelo.

Mariano Crespo 



              

martes, 19 de junio de 2018

LUNA DE MIEL




La recuerdo sujetando una cerveza 
mientras desafinaban los músicos.
Meneaba con elegancia la melena
a la vez que la noche se empeñaba
en mantener la verticalidad,
una vez perdida la cordura
Los vatios propagaban que era divina
y yo pidiéndola en matrimonio
porque nunca había visto una sirena
por la que quemar mis calles
y vivir eternamente en una pecera.
Nos despertamos vestidos
en una playa nudista repleta.
Una metáfora de disparate
con los cuerpos llenos de arena.


Eso fue todo
Tan hermoso como un bello descuido
en un jugador de ajedrez enamorado.

Los elegidos por estas lunas de miel
sin boda, sin Cupido, sin anillos,
se despiden sin prometerse nada,
y con todo de nada incumplido.

Mariano CRESPO
© Fotografía de EDUARDO MOMEÑE