"El problema, el gran
problema,
es volver a empezar siendo el que se era"
Sara Zapata"El después"
Los dioses en que creí
sirven de marcapáginas
para señalar la palabra mito
en el diccionario que sujeta en la estantería
a mis queridos poetas, guarecidos en sus libros.
Tuve doctrinas cuando me
peinaba a raya,
modelos terrenales cundo me soñaba astronauta,
citas para redimirse después de masturbarse.,
maestros que quisieron afiliarme a su ignorancia.
Y la vida fue haciendo su
trabajo.
Pisé los charcos y
defraudé a todos los moldes
que los proyectos ajenos hicieron de un buen niño.
Utilice la inteligencia no
para ser sabio sino listo,
la empatía para obtener partidarios sin tener partido,
Construí precipicios para
hacer puentes efímeros.
Dilapidé besos en lugares
donde yo que tú
no pondría los labios ni el sexto sentido.
He tenido que desaprender
todo
empezando por la construcción de mí mismo.
No tengo santones,
poseo un pequeño referente a seguir
construido pegando los añicos
de todas las esculturas rotas
fruto de mis engaños.
No me esperan en ninguna
parte.
He aligerado mi vida
y me han eliminado como lastre
en el globo de otros prójimos.
Me caben las certezas en
el zurrón
y las brújulas y los mapas
los regalé a coleccionistas de trampas.
Voy tomando lecciones de
amor
de los tachones de mi libreta de afectos.
Soy mejor amante cuanto
más me alejo
de ese joven que hirió a mujeres
que le quisieron.
Las páginas negras del
amor estéril
las riego con nuevos brotes de primavera.
Me voy demoliendo
construyéndome.
Tengo la curiosidad de los cachorros
y no me dan miedo las lágrimas.
He aprendido a sonreír a moco tendido
llorando hasta destornillarme.
No soy nada pero ya,
afortunadamente, no soy la nada de antes.
© Mariano Crespo