La construcción social de la realidad también es una burbuja.
Resulta tan cruel y absurdo el espejismo
que cuando se da el revólver del voto al obrero
por rebeldía, en el pie de apoyo, se dispara a sí mismo.
Bajo el deseable hechizo del hada suele esconderse una bruja.
© Mariano Crespo Martínez
Si señor!
ResponderEliminarA todos les gusta hacer la cama en algún momento. Pero por supuesto nunca a expensas de los pobres electores barridos por miserias, y todo hay que decir, ya inoculadas de tanta infección que no tiene ni vacuna.