Algunas noches,
al apearme del día en la cama
albergo la certeza de que hay gente convencida
de que mi existencia y la de los míos es nociva y tóxica.
No es de los asuntos que piensas
pertenece al género de lo que notas,
Es en ese intante preciso
cuando me indigno con Juan Sebastián y las gaviotas.
No porque existan y sean especies protegidas como los buitres.
La amargura es porque tú les votas.
© Mariano Crespo Martínez
Por supuesto que eres nocivo y tóxico, y pobre de ti si dejas de serlo.
ResponderEliminar