Épocas en mi vida
ha habido en que el polvo
se amontonaba debajo de la cama.
Tiempos mágicos
en que el polvo se acumulaba arriba.
Incluso, tiempos en que residía
abajo y arriba.
También, ay, hubo tiempos
en el yo era el polvo,
la esencia de la cenizael desgaste de la materia
de los sueños y las carencias.
Por qué llamaremos polvo
al deseo de lo eterno
a la pérdida del pasado
a un absurdo me voy y llego.
A un máster para dios menor
si en el firmamento hay consenso.
© Mariano Crespo
No hay comentarios:
Publicar un comentario