No se elige amar porque lo razonable
es estar plácido.
No hubiera elegido escribir
si hubiese recibido de un pariente una herencia
de certezas.
El destino si existe es lo más parecido a un secuestro.
Cuando el amor y el poema me secuestran
estoy dispuesto a matar a quién intente rescatarme.
En el internado tuve a menudo el deseo
de asesinar al fraile encargado de despertarnos del sueño.
© Mariano Crespo Martínez
Me encantó Mariano!! Me hiciste volar por un rato, y ése es mi deseo cada vez que leo!
ResponderEliminarcomparto mis poesías yo también cuando quieras date una vuelta, http://paseoliterarionuy.blogspot.com.ar/
Cariños!