Es curioso esto del miedo, de los miedos.
Cuando niño temes a lo desconocido.
Mi pánico ahora tiene rostro,
nombre y apellidos.
Cuando niño quieres estar acompañado.
Mi pánico ahora no está en la soledad, reside en otros.
Lo malo del cine de terror es que se vuelve realista con los años.
Cuando niño temes a lo desconocido.
Mi pánico ahora tiene rostro,
nombre y apellidos.
Cuando niño quieres estar acompañado.
Mi pánico ahora no está en la soledad, reside en otros.
Lo malo del cine de terror es que se vuelve realista con los años.
© Mariano Crespo Martínez
Es curioso. Los miedos van cambiando, pero no nos abandonan.
ResponderEliminarMuy bello y detonante de introspección. Como siempre.
Gracias.