Tal vez no existas
y solo seas
el desarrollo de un beso
sobre una fotografía no disparada
al húmedo músculo cardíaco
por una bala de plata.
El aroma del verde otoñal
devenido en entelequia.
El hábil conejo que ocultaba mi chistera.
Aquel grupo de palabras
que carente de rasgo, prueba ni seña
no permite un ápice de duda
en que alberga un poema.
La mirada que te pone en fuga
y aguardas
porque ha llegado tu hora
de soportar
el denso peso de la noche con una loba
sin manada.
Tal vez no,
pero si resulta que sí,
¡qué fiesta!
Lo que no admite duda
es esa torpeza
del que jamás te goza por no mirar la esencia.
© Mariano Crespo Martínez
Precioso y a la vez desconcertante. Dudas y miedos ... Pero principalmente la ilusión.
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