Cómo me gustan las mujeres.
Que tengan la inteligencia
sin vértigo
a la altura de la autoestima.
Luego, como a todos,
que cuando me tarareen besos al oído
se me pongan las orejas como pupilas.
Y, por encima de todo,
que me siga mirando con esa piedad
que para los pájaros cultiva
en los humedales verdes de sus ojos.
© Mariano Crespo Martínez
Mariano..." Mujeres sin vértigo "
ResponderEliminarNo tengo mis ojos verdes pero puedo
hacer poner las orejas como pupilas.
¡¡¡ preciosa poesía !!!
un beso desde Argentina
Mariano...
ResponderEliminarMe ha encantado además de la poesía el video ..gracias por compartirlo
Gracias, Doris. Espero que vengas a menudo de visita.
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