Páginas

lunes, 13 de mayo de 2013

Si no es magnicidio cómo se llama




Creo recordar que he visto cimbrearse a los chopos

ebrios por el soporífero licor del viento del sur.


Estaba a ocho metros de Adolfo Suárez en el preciso


momento en que con dignidad arrojaba la toalla


y un redactor jefe me había enviado porque en el CDS

no había canapés de calidad y nunca pasaba nada. 



El día que mataron a Kennedy la acera hervía 

por una tarde impía que hizo que las porteras,

con mi madre a la vanguardia,

fueran plañideras con una convicción rara,

entre el espanto y la alharaca. 



Pasarían muchos años hasta la mañana
 
en que aprendiera en clase de Lengua
 
que magnicidio era que metieran al mundo

un tiro en cabeza ajena.



Jamás imaginé que vería reventar la cabeza

al mundo para salvaguardar algunas carteras.


Y si su nombre no es magnicidio cómo se llama.



© Mariano Crespo Martínez








                      
   

No hay comentarios:

Publicar un comentario